¡GRACIAS!

Debemos decir ¡gracias!
siempre, a cada gesto amable, simpático, cálido
debemos decir ¡de nada!
cada vez que alguien nos dice ¡gracias!
cuánto tedio en estas singulares muestras de hipocresía, de malicia, de sorna,
cuántos fantasmas ríen alrededor de nuestras propias cadenas...

1 comentario:

Sebastian dijo...

Fantasmas que ríen alrededor de nuestras cadenas... ala... me gustó mucho eso. ;)