Regresar

Lo bueno de tener a donde regresar, es que no importa lo que pase, siempre sabes que tienes aquel lugar donde poder refugiarte... creo que eso siempre ha sido esto para mi, y quizá eso fue lo que en principio quería que significara. Imaginamos una estación abandonada, donde sólo trenes fantasmas llegaban, a veces y por coincidencia terminaríamos ahí de cuando en cuando. Y esta es mi historia que quiero contar.

Finalmente, después de toda una mazamorra sentimental, por fin siento que otra vez encuentro mi ritmo; como un beat electrónico mis dedos golpean el teclado, y por fin, puedo pensar en otras cosas fuera de lo que se había convertido en sombra de todo lo que la cesera maquinaba.

No sé cuanto tiempo ha pasado en realidad, no sé si cuenten las noches que casi no encontraban sueño, no sé si cuenta que a veces los días parecían semanas y las semanas interminables; pero al fin y al cabo, uno no puede darse el lujo de quedarse estancado en un momento para siempre, más aún cuando la realidad golpea tu puerta diciendo " los para siempres, no existen".

Creo que al final mi problema siempre ha sido querer demasiado, demasiadas cosas, demasiado a una sola persona, demasiado de la vida y demasiado de lo que podría llamarse amor... Cuando uno despierta de eso, la sensación de haber estado soñando todo el tiempo vuelve a cazarlo como un viejo diablo al cual le vendiste el alma, como los hellhounds que abundan en una vida llena de dolor y sufrimiento... Y por eso, algún tiempo atrás, había decidido que combatiría aquello que hace sufrir, intentando contagiar un poquito de sensaciones pop, o como quiera que se llamen. Hoy sé, que no puedo hacerlo, que no puedo siempre verle el lado positivo a la vida, pero que puedo reir incluso de las peripecias del viaje hacia un futuro inevitable, y que por lo menos eso quedará al final, una bitácora llena de risas y sonrisas a medio curar.

Así que al demonio con todo! (y todos con el demonio, que cuando uno menos se lo espera viene y se pone de tu parte) Y empezaremos otra vez, a partir de aquí, a buscar que escribir para hacer este espacio al cual siempre se puede regresar, un lugarcito más confortable.

Un abrazo para todos.