Kill a foolish me:

Todo se convierte en pasado, sin importar cuanto intentemos que no.

Yo te quice, como sólo se deberían querer a las mañanas claras,
quice tu felicidad por siempre jamás, tus rompecabezas amar,
armarte de a poquitos en mi cabeza cada día;
entenderte, no fue la parte difícil,
desentenderme lo es.

Yo no quice que prometieras,
ni tampoco prometer por hacerme al que comprendía lo que decías
y las tantas veces que me fui sin intentar besarte,
dejé tanto de mí en esa boca tuya, que tan tuya ya no era.

Que dejaras de quererme, era cosa tuya,
lo que yo hiciera después era una apuesta con cartas marcadas
quien no quiere mantener lo que quiere?

Sabía que te irías, y aún así te pedí que te quedes
sabías que no lo harías, mentiste, y te creí
y viví feliz de mentirita,
como arena entre los dedos, como sal en la mar
te fuiste diluyendo y dices que no sabes que pasó
yo lo ví, yo estuve ahí... tambien.

Cuanto empezaba realmente a saber de ti,
ya era demasiado tarde
te quería eones atrás,
y ahora que intento no intentar,
tu nunca habías siquera empezado,
visionaria tú,
desfasado yo, un verso más y hacemos un blues.

"dulce tormento, yo tan mayor y no escarmiento"

Pero ya va:
que con buen humor los esclavos levantaron las pirámides
y así dijeron "parece que vamos a tener marea alta hoy" en atlántida,
y de una historia de principio genial
siempre se puede hacer una tragedia,
que siempre hay para quien es comedia.

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