El día de noche, después del tiempo

Pido un “café americano” mientras voy volteando de rato en rato hacia la mesa en la que esperas, impávida con una tasa de Mocaccino. La verdad no esperaba verte después de tanto tiempo; y valga decir que mi ausencia no te sentó nada mal. No es por menospreciar la apariencia que tenias cuando estábamos, solo que… cada día que te veía era un regocijo para mis ojos miopes ¿Ahora te puedes imaginar que es verte después de todo este tiempo?

Recuerdo que en ocasiones como esta, (tú y yo en el mismo café) jugábamos como niños las “manitas calientes”. No nos importaba que el resto nos mirase, éramos un par de chiflados encerrados en nuestro mundo, nuestro espacio intangible solo para nosotros. Pero maduramos… mejor dicho maduraste.

Al verte sentada puedo ver cuán cambiada estas. Como ves (si es que lo notaste) yo sigo con las mismas fachas, quizás lo único de maduro que pueda tener en estos momentos es la poca barba que tengo; las ojeras siguen como de costumbre, aunque hay días en las que se marcan mas. Si… aun tengo problemas para dormir; trastorno que aprovecho para leer y escribir. Tú sabes aun conservo esa costumbre. Después de nuestra prolongada despedida algunas veces me permitía dibujarte, y escribir notas al vacio que esperaban nunca ser leídas.

CONTINUARA….

1 comentario:

Yadips Cyberfood dijo...

interesante.. para cuando la 2da parte?